por: Francisco Figueroa
Gilgamesh era el
gobernante de un pueblo que en realidad no tenía como defenderse ante este
hombre que era dos tercios dios, abusaba de mujeres y esclavizaba jóvenes, lo
cual se ve desde la antigüedad y en varios países que terminan llegando a una
Independencia. Lo cual fue el recurso que tomo esta gente, llamaron a Aruru
quien creo al hombre de arcilla y le pidieron crear a alguien que derrotara a
Gilgamesh.
Pero, quien al final, termino siendo el único amigo de Gilgamesh,
acompañandolo en aventuras y travesías que en un momento, convencieron a
Gilgamesh de querer ser inmortal, el deseo de Gilgamesh de esta inmortalidad
era incomprensible, veía a los dioses como figuras mayores a las cuales él
quería imitar, por lo cual comenzó este viaje en busca de la juventud eterna,
que se relaciona un poco a la búsqueda humana de simplemente ser felices, lo
cual igual a Gilgamesh le costó, y cuando al fin llegó al lugar, comprendió que
era humano, y después de todo, igual que cualquier otro hombre, tenía ya un
destino impuesto, el morir.
Yo comprendí que Gilgamesh como humano y dos tercios dios, se creyó
dios, quiso burlar algo que esta fuera de su alcance, el cual era su destino, y
como tenía una vida plena y llena de placeres, la quiso hacer infinita, pero no
pudo, se dio cuenta de que con lo que poseía, iba a tener que conformarse y
disfrutar lo que le quedaba de ella. Y, aun siendo en su mayoría Dios, pudo
comprender la amistad, algo muy humano, y crear relaciones cercanas a él que le
ayudaron a ver de otra manera a los pueblos que gobernaba. Para mi Gilgamesh tuvo
un gran cambio a lo largo de la historia, desde ser egocéntrico y despiadado,
llego a amar y ser noble aunque sea con una persona.
me acuerdo que en la universidad vimos este libro aunque muy rápido, esta padre y apóyate en otras reseñas para que lo entiendas mejor.
ResponderEliminarbuen trabajo...
En la Epopeya de Gilgamesh, encontramos un hombre semi dios que desearía ser inmortal y, que al paso del tiempo comprende que allí no está la felicidad, sino en saber vivir la vida con honestidad y nobleza...
ResponderEliminarYo creo que Gilgamesh no se sentía parte de algo, no era dios pero no era completamente humano, entonces él quería ser algo en concreto, por supuesto el quiso ser un dios, pero su destino no era ese ( lo cual se pudo observar en cada intento que hacía para ser inmortal), al final él acepta su mortalidad, su destino, confortado en que iba a ser recordado gracias a su amigo.
ResponderEliminar