lunes, 9 de diciembre de 2013

“La divina comedia (El Infierno)” de Dante Alighieri

Por: Paulina Navarro Montenegro

Dante sosteniendo la Divina Comedia.
Atrás el Infierno, el Paraíso y el Purgatorio.
Dante es el personaje principal de la obra, él personifica a la humanidad. Al principio está perdido en una selva obscura, pero se encuentra con Virgilio, uno de los poetas que él mas admiraba, escritor de La Eneida. Virgilio se presenta como su guía y le informa que Beatriz, al ver a su amado perdido, lo envió para que le ayudase. Virgilio lo acompañará durante su recorrido por El Infiero, El purgatorio y finalmente, El paraíso.
Cuando logran salir de la selva, visualizan una colina bañada por el sol a lo lejos: El sol simboliza la divinidad, y la colina, el camino que se debe seguir y subir arduamente para estar más cerca del sol. Durante el recorrido se encuentran con tres bestias, un león que será la soberbia, una loba, a la que se le atribuye la avaricia y una pantera la cual representa la lujuria, éstas le impiden llegar a la colina para poder ser un hombre libre de pecado.
El Infierno según Dante

Antes de llegar al infierno, se encuentra el anteinfierno, aquel lugar a donde los hombres indiferentes, aquellos que no tuvieron ninguna creencia. Sin ropa, ellos persiguen una bandera que no significa nada y son perseguidos por avispas que pican sus cuerpos desnudos. Esta escena se interpreta como el castigo (las avispas) de una vida sin sentido alguno.
Al llegar al infierno, Dante lee una inscripción en sus puertas que dice "Es por mí que se va a la ciudad del llanto, es por mí que se va al dolor eterno y el lugar donde sufre la raza condenada, yo fui creado por el poder divino, la suprema sabiduría y el primer amor, y no hubo nada que existiera antes que yo, abandona la esperanza si entras aquí". Dante y Virgilio llegan al primer círculo: El Limbo. En este lugar se encuentran todos los hombres virtuosos que nacieron antes de Cristo, así que no pudieron ser bautizados. Al llegar, Virgilio habla con simpatía con sus compañeros y les presenta a Dante como un poeta como ellos. Todos charlan alegremente por un breve momento, entre ellos están Ovidio, Homero, Sócrates y Aristóteles.
Los dos hombres siguen su camino y arriban al segundo círculo, el de los lujuriosos. Según Dante, ésta es una cámara más pequeña que la anterior pero más desagradable: escucha los gritos y gemidos de los cuerpos se golpean unos contra otros completamente desnudos a causa de un torbellino. Ahí, Dante reconoce a Cleopatra, que estaba casada con Julio Cesar pero lo engañaba con Marco Antonio.
En el siguiente círculo, el tercero, se encuentran los hombres golosos, también llamados desenfrenados. Son mordidos por Cerbero, el animal de tres cabezas mientras sus cuerpos siempre están mojados ya que se encuentran en un pantano.
El cuarto círculo está a cargo de Pluto, dios del dinero. Las almas que aquí son castigadas pertenecían a personas tanto avaras como despilfarradoras y su castigo es cargar una roca eternamente.
Al llegar al quinto círculo Dante se encuentra con las almas iracundas y perezosas. Mientras cruzaba la laguna Estigia, uno de ellos trato con enojo de subir a su barca o hacerlos caer, pero no lo consiguió gracias a Virgilio. El barquero que los acompañaba era Flegias. Después llegaron a la muralla que dividía el alto infierno del bajo infierno, llamada Muralla de Dite. Allí Dante vio a tres mujeres horribles que lo miraban desde lo alto de una torre, entre ellas se encontraba Medusa, y Virgilio lo salvó de que la mirara a los ojos y ésta lo convirtiera en piedra.

Siguieron andando y mientras más se acercaban al centro del la tierra, más horrible era el Infierno. El sexto círculo estaba compuesto po los herejes, aquellos hombres que no creían en Dios y blasfemaban en su contra, su castigo era repostar en una tumba ardiendo en fuego
El séptimo círculo es muy interesante ya que tiene varias fosas, ya que aquí se encuentran los violentos y existen varios tipos de ellos:
En la fosa primera estaban los violentos contra el prójimo, en la segunda se encontraban los violentos contra sí mismos, es decir, los suicidas. Éstos se convertían en árboles y lloraban. En la tercer fosa estaban los violentos contra Dios y la naturaleza, estos sufrían sumergidos en un río congelado.
Al igual que el séptimo, el octavo círculo tiene varias fosas:
Fosa primera: Seductores y rufianes, fosa segunda: Aduladores. Desconfía de quien te elogia demasiado. Su castigo es nadar entre excrementos humanos. En la fosa tercera están los simoniacos, en la cuarta fosa se encuentran los magos y adivinos, su cabeza esta hacia atrás para que no puedan ver hacia adelante, o el futuro como en su vida lo intentaron. Fosa quinta: estafadores. Fosa sexta: Hipócritas, ellos cargan piedras doradas. Séptima fosa: ladrones. Octava fosa: malos consejeros. Fosa novena: sembradores de discordia. Décima y última fosa de este círculo: Falsificadores.
En el noveno y último círculo es donde se encuentra Lucifer, él se encuentra en un lago congelado sumergido hasta el pecho y tiene tres rostros, con sus tres bocas devora almas mientras llora. Aquí se castiga a los mayores traidores de la historia: Judas, Bruto y Casio.

Lucifer comiendo almas, Dante y Virgilio lo observan.

Es muy interesante el séptimo circulo, el de los violentos, porque Dante relata que los ve desgarrándose a sí mismos con sus propios dientes, esta es la representación del daño que en vida le hicieron al prójimo, ese mismo daño, ahora lo reciben ellos de sus propios dientes.

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