"La Odisea" De Homero: Canto IX

Por: Francisco Figueroa

Odiseo, después de romper en llanto al escuchar el canto del caballo de Troya, Alcínoo le pide que cuente sus viajes y experiencias. Odiseo le cuenta sus aventuras vividas  durante la guerra de Troya, a las personas en el festín del palacio de Alcínoo, rey de Esqueria de los felacios: los cicones, los lotófagos, los cíclopes. Odiseo se presenta y revela su verdadera identidad, comienza a relatar su historia desde que salió de Troya y después de ella. Primero, cuando fueron y destruyeron la ciudad de Ísmaro (donde estaban los cicones), una guerra difícil en la que perdió a bastantes compañeros. Hubo enfrentamientos en las playas durante el día y la  noche, y al ser superados en número, después de aguantar la emboscada, partieron en retirada remando.

Más tarde, al seguir su camino, llegaron a la isla de los lotófagos. Ahí  tres de sus compañeros entraron en la isla y se encontraron con los lotófagos, quienes les dieron a probar el loto, dulce como la miel y perdieron el deseo de regresar a sus tierras a contar sus historias y victorias, por las delicias que habían comido, por lo que Odiseo no fue capaz de convencerlos y tuvo que llevárselos a la fuerza, atándolos a los bancos del barco y haciéndolos remar. Después llegaron a una isla cerca de donde viven los cíclopes, donde  descansaron  y comieron reces y ovejas para recuperarse de la batalla contra los cicones. 

A la mañana siguiente llegaron a la isla de los cíclopes y por una niebla inmensa tuvieron que bajar en ésta y se adentraron 12 de sus mejores hombres  de la tripulación en una cueva buscando comida, pero quedaron atrapados en la cueva,  cuando el cíclope Polifemo hijo de Poseidón dios de los mares, llegó y cerro la cueva con una inmensa piedra  y al encontrarlos dentro de ella se sorprendió y se comió a dos de sus compañeros, Odiseo trató de razonar con él pero fue imposible, a la mañana siguiente se comió otros dos y así por igual al anochecer. Esa misma noche Odiseo creó un plan para escapar de la cueva, emborrachó a Polifemo con vino como señal de amistad y cuando dormía le clavaron una estaca ardiendo en el ojo, cegándolo. Y cubriéndose de pieles de oveja y reces salieron por la entrada que se abrió con el grito estremecedor que emitió Polifemo. Odiseo le dijó que era su castigo por comerse a sus amigos y Polifemo le imploro a su padre Poseidón que no permitiera a Odiseo salir de los mares.