“Prometeo encadenado” de Esquil

Carolina Ayala Trigo

Tema: Prometeo, el Dios más humano de los dioses

El dios mas rebelde de los dioses, rebeldía

La actitud de rebeldía puede definirse como volverse contra la autoridad establecida en posición de querella o guerra. Es una actitud que suele darse a nivel individual (contra uno mismo) cuando alguien cambia su forma de ser o pensar, ante la disconformidad de quien ha sido ante ese momento, o contra la naturaleza (por ejemplo rebelarse contra una enfermedad, lo que en general resulta infructuoso); o social, cuando una o más personas se sienten en oposición a normas o valores impuestos jerárquicamente. 

Prometeo, aquel que luchó por la humanidad, aquel que sacrifico su cuerpo por los seres humanos. Ser humano, animal racional, llamados Homo Sapiens (hombre que piensa) o sea, machos y hembras de la especie, tiene características particulares que lo distinguen del resto de los animales, y que ha hecho que sea considerado por sí mismo como una especie de rey de la creación. Esa característica distintiva es su capacidad de razonar o pensar, que lo ha conducido a modificar la naturaleza en su propio beneficio, a tal punto, que ha provocado su contaminación y deterioro ambiental, lo que en definitiva conlleva a su propia destrucción.

En el texto llamado “Prometeo encadenado”, Prometeo, hijo de Zeus (Dios del rayo y del trueno), se decide a darle el fuego a la humanidad, por su acto, considerado traición para Zeus.

Zeus manda a su hermano Hefesto a que encadenara a su propio hermano por su mal acto, no hallaba una razón por la que Prometeo haya hecho tal cosa (darle e fuego a los dioses y sacrificar tanto por la humanidad).

Prometeo estaba seguro de lo que había hecho por la humanidad y no le importaba lo que la humanidad había hecho o sus actos, además de darles el fuego les enseña nuevas cosas, les enseña a ser inteligentes. Por lo tanto Zeus se enfurece y no logra aceptar lo que había hecho Prometeo por la humanidad, pues Zeus quería crear una nueva raza.

Prometeo no quería aceptar su castigo, así que le arrancan una parte de sus órganos, y la historia se repite, Prometeo no cambia de opinión pues él está seguro de su decisión y lo que ha hecho por el hombre aunque este sea racista, egoísta, tonto, cruel, etc.